5 aspectos a considerar para elegir un sistema de gestión.
Cuando decidimos implementar un nuevo sistema de gestión es porque buscamos mejorar las cadenas de abastecimiento, la organización de inventario, aumentar las ventas y sobre todo tener una clara visión de mi empresa y acceso rápido a toda la información para la mejor toma de decisiones.
Muchas pymes cometemos el error de seleccionar un ERP (sistema de gestión empresarial) por precio y no evaluamos otras cuestiones tan o más importantes que los costos y por eso fracasan los proyectos o nos encontramos con la necesidad de cambio de ERP a los pocos años.
¿Qué aspectos debemos tener en cuenta en el momento de encarar el proyecto de implementar un ERP en nuestra empresa?
1. Pensar cuáles son nuestros objetivos.
- ¿Qué queremos lograr con la implementación de un ERP en la empresa?
- ¿Qué procesos necesito “ordenar” y de cuáles requiero información?
- ¿Qué información quiero obtener?
Los objetivos deben ser medibles para que se pueda calificar el éxito de la implementación.
2. Seleccionar un adecuado ERP.
Al momento de elegir un ERP debemos pensar no solamente cumplir con los objetivos actuales sino que sea una herramienta que se adecue y acompañe a nuestro crecimiento. Un buen sistema de gestión, se adapta tanto de forma horizontal (con más módulos y funcionalidades), como vertical (donde el modelo evolucione y aumente la cantidad de transacciones).
La palabra clave es escalabilidad, es decir, que posea la habilidad de reaccionar y adaptarse sin perder la calidad.
3. Considerar el tiempo de implementación.
Es fundamental para las pymes pensar en proyectos cortos que permitan observar el retorno sobre la inversión de manera rápida. Una pyme no se puede dar el lujo de imaginar una implementación de muchos meses o incluso años.
4. Elegir un proveedor de ERP que sea un socio estratégico de negocios
Deberá ser una empresa que comprenda cabalmente nuestros objetivos y nos acompañe en el proceso de transformación. El proyecto de implementación del ERP es un momento de tensión y mucho trabajo. Debemos elegir un proveedor con experiencia en gestión de proyectos, que anticipe los posibles problemas e inconvenientes y pueda brindarnos asesoramiento sobre como sortear cada uno de ellos. Un buen socio de negocio además, nos brindará un soporte que se adecue a nuestras necesidades luego de la salida en productivo.
5. Comunicar la gestión del cambio y requerir el compromiso.
Una de las principales razones por las que fracasan los proyectos de implementación es una mala administración del cambio. Una alteración en el sistema de gestión puede ser drástica para nuestros colaboradores. Debemos lograr mantenerlos permanentemente informados, logrando el compromiso de éstos y siendo claros en cuál es la finalidad que la empresa persigue. Así, lograremos un equipo motivado y con sinergia a fin de alcanzar el objetivo.
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